El pasado Rallye Cerámica, en su trigesimocuarta edición, nos «obsequió» con un final de infarto que se resolvió por apenas un segundo de diferencia, a favor del piloto murciano Carlos Moreno, que se impuso por tan exigua renta, a la pareja formada por el valenciano Miguel García y el andaluz Osel Román.
Como se preveía, el Cerámica estuvo plagado de incidencias y alternativas en la clasificación. Los primeros tramos de la mañana, fueron dominados por el aragonés Adrián Lecha, en las cuatro primeras especiales, sorprendiendo con sus prestaciones y las de su Ford Fiesta N5 a los habituales del certamen valenciano que, eso sí, seguían a la zaga del Ford, con Ariete, Moreno y García a menos de medio minuto.
Sin embargo, en el primer tramo de la tarde, Toni Ariete y Noemí Garrido, tiraban de galones y endosaban casi 17 segundos a Lecha y Maniega y 3 a Moreno-Fuentes en primera pasada por Cedramán-Ludiente. De esa manera recortaban la diferencia a tan solo 8 segundos con Lecha y 2 con Moreno.
Ya en el primer paso por Argelita-Lucena, los del número 1 iban con todo para liderar el rally, en una estrategia de carrera perfectamente trabajada, pero, en esta ocasión, la mala fortuna se hacía presente en forma de pinchazo y dejaba a los de Hyundai sin opciones. A falta de dos tramos, Ariete y Garrido seguían empujando, haciendo segundos detrás de García, lo que les habría valido para ser líderes de no haber perdido siete minutos en el cambio de rueda.
Así pues, Moreno se quedaba con el primer puesto, García segundo y Lecha tercero, pero el podium del rallye traería una nueva sorpresa. Tras las verificaciones técnicas finales se detectaba una deficiencia técnica en el Ford Fiesta de Lecha y Maniega, la ausencia del obligatorio catalizador les suponía una penalización de 5 minutos que les llevaron a la sexta plaza final.
Al final, el cajón quedaba compuesto por Moreno-Fuentes, Garcia-Roman y en tercera posición subían Tolosa-Salom con Porsche 911.
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Fotos: Juanjo Aviño